Un año más, la crónica post-evento.

Por cierto, no estamos seguros de si es la quinta o sexta edición del evento. ¿Alguna mente lúcida que guarde estos datos en el disco duro?

La cita era doble, o en la estación a las 9:50 o en el tunel de Otita a las 10:30. Me consta que alguno pilló el tren de churro. Tiene que ver con haber ido antes a la playa, sí, a esas horas, a recoger una toalla que se le olvidó la víspera. Se admiten apuestas.

El caso es que el grupo llegó puntual al tunel de Otita donde les estaba esperando yo, que fui con la furgo. Al principio me asusté al no ser capaz de identificar a un ente de dudosa naturaleza que se acercaba hacia mi en bici a toda velocidad. Era Félix. Lo que me despistó es que llevaba un casco de moto (por lo menos no era integral), y una linterna frontal que debía de ser de la generación inmediatamente posterior a las lámparas de carburo. Todo ello le daba un inquietante aspecto de entre minero y skater.

Nada más salir, la encargada de las fotos, Birte (que por cierto no se si es con V o con B), nos informó de que la cámara no tenía pilas, razón por la que contamos con escasísimas descripciones gráficas del evento. Igual mejor. Contamos con la foto del almuerzo en la central de Amaraun que se comentará más adelante en detalle.

El recorrido de ida transcurrió sin grandes incidentes, con la excepción de un charco traicionero a la salida de un túnel que pasamos de aquella manera. Convenimos en que habría que tener cuidadín en la bajada, dada la velocidad que se alcanza y los efectos de los efluvios del alcohol que previsiblemente íbamos a sufrir.

En la famosa foto del almuerzo, hay un detalle que requiere de explicación. Algunas os habéis dado cuenta de la particularidad del uniforme de Félix. No es que el rozamiento le produjera extrañas inflamaciones, ni que se esté hormonando para llegar más fácil a las notas graves. Tampoco es que llevará un traje de halterofilia como ha apuntado alguna. Es que llevaba culot reglamentario, pero puesto del revés; o sea, lo que es la parte del culo, delante. De ahí las formas. Y se dio cuenta llegando a Leiza…

Justo antes de llegar a Leiza tuvimos un incidente. Yo no lo vi porque iba un poco por delante. En un momento dado oí unos improperios, algún frenazo, y luego el inconfundible sonido de bicis en el asfalto. Cuando me di la vuelta vi a los dos veteranos del grupo por los suelos. Joseba, que si vio la caída, comentó algo de una poco edificante mezcla de gelatina y hierros. Por suerte no se hicieron daño. Como comentó Félix, «hemos sabido caer bien». Claro, cayó sobre Norberto…

El motivo de la caída no está claro. Parece relacionado con un intento de maniobras arriesgadas más propias de cualidades psicomotrices más afinadas que las de los protagonistas implicados en el suceso.

Por fin llegamos a Leiza. Tardamos más en encontrar el bar que en llegar desde Andoain, pero lo conseguimos.

El restaurante estaba bien. Es de los que pides sopa para tres y te sacan un caldero para todo el restaurante. Además, bastante rico todo.

A la vuelta tuvimos la baja de Bernar, la amiga de Félix que, con buen criterio, dijo que sin frenos no le apetecía bajar. Lo de los frenos se dio cuenta a primera hora de la mañana cuando, al grito de «Félix, que esto no frena» abordó a un pobre transeúnte. La bici se la había prestado Félix.

Como de costumbre, los veteranos se lanzaron a tumba abierta dejando rápidamente al pelotón detrás. Primero pillamos a Félix atascado en un charco diciendo algo sobre el plato grande.

Poco más adelante encontramos a Norberto chapoteando a cuatro patas en un charco con bici y todo. Se había caído (empieza a ser una costumbre en las bajadas). Por cierto, era el charco que comentamos a la ida…

Llegamos sin mayores contratiempos en agrupado pelotón hasta el túnel de Otita donde los dejé, no sin cierta preocupación, cruzando el túnel hacia Andoain. No he leído nada en los periódicos, así que supongo que llegaron todos sanos y salvos.

En fin, el ranking de este año:

.- Ganador en la general: Ex aqueo, entre Norberto, por el que no pasan los años y Joseba, que completo una carrera seria sin fisuras.
.- Ganadora en categoría femenina: Birte, que demostró que se puede hacer el recorrido con una bici tipo «verano azul» y un par.
.- Premio al modelito: Félix, por lo del culot alrevés
.- Premio de consolación: Bernar. Hay que aguantar a esta tropa…
.- Premio a la novedad tecnológica: tengo dudas entre Birte, por sus cestitas metálicas plegables que causaron furor, o Joseba, por los guardabarros gracias a los que llegó hecho un pincel al final de la etapa
.- Premio a la aportación extraordinaria al acervo cultural de la humanidad: Bernar. Nos obsequió con una receta natural contra las almorranas (no se si nos vio cara rara). Consiste en mezclar y hervir una cantidad indefinida de ortigas, romero y cola de caballo y tomar baños de asiento en bidet o «algún puchero»(?). Lo del bidet me lo puedo imaginar, lo otro no alcanzo. En cuanto a las cantidades, no están claras las proporciones. Yo, por si acaso, me moderaría con lo de las ortigas.
.- Premio extraordinario del jurado: Félix. Sin él, estas excursiones no serían lo mismo.

Bueno, pues eso es todo amigos!

Antton